Aquí podrás encontrar información sobre lo que implica la seguridad de los niños en sí mismos y herramientas sobre como fortalecerla.
jueves, 10 de diciembre de 2015
Niños seguros de si mismos
La seguridad en si mismos, es la habilidad que se tiene para poder realizar actividades sin ningún a equivocarse o al qué dirán.
Se necesita tener seguridad en sí mismo para ser un niño feliz. Bien sea al llegar a una nueva escuela o al salir a jugar por primera vez, los niños enfrentan muchos retos.
Como es natural, los padres quieren fomentar en sus hijos una actitud de persona que puede hacerlo todo para que ellos acepten nuevos retos con valentía y eventualmente tengan seguridad en sí mismos. Mientras cada niño es diferente, los padres pueden seguir ciertas reglas generales para que desarrollen seguridad en sí mismos.
Tener
seguridad en sí mismos se deriva de una sensación de sentirse competente. En
otras palabras, los niños no desarrollan seguridad en sí mismos porque sus
padres les dicen que son geniales, sino en base a sus logros, tanto pequeños
como grandes. Por supuesto que es agradable escuchar palabras de aliento de
papá y mamá. Pero este tipo de reconocimientos tienen más significado cuando se
refieren a los esfuerzos específicos o a las habilidades nuevas de los niños.
Cuando
los niños alcanzan un logro, bien sea cepillarse sus dientes o montar en
bicicleta, tienen una imagen de sí mismos como personas hábiles y capaces,
obteniendo gran seguridad en sí mismos.
Desarrollar
este tipo de seguridad puede comenzar a una edad muy temprana. Cuando los bebés
aprenden a pasar las páginas de un libro o cuando los infantes aprenden a
caminar, comienzan a tener una idea de "¡Yo puedo hacerlo! Con cada
habilidad y logro importante, los niños incrementan la seguridad en sí mismos.
Los padres pueden ayudar a los niños facilitándoles oportunidades
para practicar y perfeccionar sus habilidades, permitiendo que cometan errores
y facilitándoles apoyo para elevarles el ánimo para que sigan intentándolo.
Responda con interés y entusiasmo cuando los niños demuestran una nueva
habilidad y prémielos con halagos cuando alcancen una nueva meta o hagan un
buen esfuerzo.
A base de oportunidades, preparación y mucha paciencia por parte
de los padres, los niños pueden llegar a dominar habilidades básicas, como
amarrar los cordones de los zapatos o arreglar la cama. Más adelante, cuando se
presenten otros retos importantes, los niños podrán enfrentarse a ellos con la
seguridad de que ya han tenido éxito en otras áreas.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)